Los diferentes estados de conciencia, energías chakras, se encarnan y se integran desde la apertura del corazón.
La apertura de este, nos permite fundirnos con la conciencia divina de dios, y al mismo tiempo, fundirnos con él.
Ser encarnado en los diferentes cuerpos del ser humano.
Desde aquí nos podemos abrir a la posibilidad del amor como estado de conciencia, donde todo es integrado, todo es acogido, donde todo ES